Después de realizar varias inspecciones y conducir una investigación que se prolongó por un mes, se confirmó que el sargento Munroe, un oficial jurado de la ciudad de Tiverton, “había estado robando gasolina” de la municipalidad, informó la Policía Estatal de Rhode Island

Miembros de la Unidad de Investigaciones Especiales de la Policía Estatal arrestaron a un sargento adscrito a la ciudad de Tiverton, Rhode Island, por 14 cargos de hurto relacionados con el robo de combustible en estaciones de gasolina.

El apresado es el oficial William R. Munroe, de 55 años, residente de Fall River, Massachusetts. Según una nota de prensa enviada por la Policía Estatal de Rhode Island a la redacción de Acontecer Latino, durante el mes de octubre de 2018, el jefe de policía de Tiverton, Patrick Jones, se enteró de que uno de sus miembros supuestamente robaba gasolina de la ciudad. Jones solicitó la asistencia de la Rhode Island State Police para investigar estas denuncias.

Después de realizar varias inspecciones y conducir una investigación que se prolongó por un mes, se confirmó que el sargento Munroe, un oficial jurado de la ciudad de Tiverton, “había estado robando gasolina” de la municipalidad, informó la Policía Estatal en su nota.

Los miembros de la Unidad de Investigaciones Especiales observaron al oficial echando gasolina a su carro de policía varias veces en los surtidores de gasolina de la ciudad, ubicados en 50 Industrial Way, Tiverton. Los detectives observaron que además de poner gasolina en su patrulla, a menudo también llenaba un contenedor grande y lo llevaba a su vehículo aparcado en la Estación de Policía de Tiverton, utilizando la gasolina para su uso personal.

Munroe fue detenido en el Departamento de Policía de Tiverton sin incidentes, y trasladado a la Sede de la Policía del Estado, donde fue procesado. Cualquier persona condenada por robo de menos de mil quinientos dólares ($ 1,500.00) enfrenta penas de prisión por no más de un (1) año, o por una multa de no más de 500 dólares, o ambos.

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Miguel A. Revolorio, de 28 años, residente del 13 Glenbridge Avenue, Providence, fue declarado muerto en la escena del accidente. Estaba conduciendo por la Ruta 10 en Cranston, al sur del paso elevado de  laReservoir Avenue, cuando perdió el control del vehículo, causando que girara.

CRANSTON, RI.- La Policía Estatal de Rhode Island informó que un hombre residente de Providence murió el domingo en un accidente fatal de tránsito ocurrido en la Ruta 10, en Cranston, hecho en el que otros dos pasajeros resultaron heridos.

Miguel A. Revolorio, de 28 años, residente del 13 Glenbridge Avenue, Providence, estaba conduciendo hacia el sur por la Ruta 10 en Cranston, al sur del paso elevado de Reservoir Avenue, cuando perdió el control del vehículo, causando que girara.

El informe policial indica que el vehículo conducido por Revolorio golpeó un bordillo, causando que girara varias veces antes de que corriera a través de un tramo y subiera por un terraplén cubierto de hierba, donde golpeó varios árboles. Revolorio fue declarado muerto en la escena. No llevaba puesto el cinturón de seguridad.

Una mujer que iba como pasajera del asiento trasero, identificada como Victoria Bautista, de 19 años, del 89 Garfield Street, Central Falls, fue expulsada del vehículo. La mujer  sufrió lesiones graves, pero su vida no corre peligro. Ella tampoco llevaba el cinturón de seguridad.

La policía dijo que un tercer pasajero del vehículo, que iba en el asiento delantero, identificado como Jonathan B. Ortiz, de 23 años, residente en la misma dirección que Bautista, también sufrió lesiones pero se encuentra fuera de peligro. Llevaba un cinturón de seguridad en ese momento.

Los dos heridos fueron trasladados al hospital de Rhode Island, indica el parte policial. La causa del accidente sigue siendo investigada por la Policía Estatal.

 

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Una investigación federal determinó que Carlos José Portes-Ortiz robó la identidad de varias personas para obtener tarjetas de crédito u de identificación de Rhode Island, Medicaid, cupones de alimentos, entre otros beneficios.

PROVIDENCE, RI.- Un nacional dominicano, que había sido deportado anteriormente, se declaró culpable ante en Providence ante una corte federal de la acusación de ingresar ilegalmente al país y utilizar las identidades y los números de Seguro Social de otras personas, sin su conocimiento, para obtener fraudulentamente asistencia médica y otros beneficios.

Carlos José Portes-Ortiz, de 38 años, de Pawtucket, se declaró culpable de fraude en la atención médica, fraude de asistencia social (SNAP), uso indebido de los números de la Seguridad Social, robo de identidad agravado y re-entrada ilegal.

Portes-Ortiz estaba entre más de 600 personas en 58 distritos acusados la primavera y el verano pasado por el Departamento de Justicia y las Oficinas de la Fiscalía de los Estados Unidos por su participación en planes de fraude, en particular planes de atención médica y fraude de asistencia social.

Portes-Ortiz, también conocido como Juan Carlos Mendieta Vega, Anthony Clausell Rivera, José Jiménez Agosto, Willian Acevedo Gil, y Allison Gabriel, fue deportado de los Estados Unidos en febrero de 2009, después de haber sido condenado en junio de 2007 a 37 meses en Prisión federal por conspiración para importar 100 gramos o más de heroína y 500 gramos o más de cocaína.

 Su arresto se produjo originalmente en junio de 2005 en el Aeropuerto Internacional Newark Liberty después de llegar de la República Dominicana.

 De acuerdo con la información presentada ante la Corte, en noviembre de 2015, la policía de Providence respondió a un accidente de tráfico y se encontró con Portes-Ortiz, quien presentó a los oficiales una licencia de conducir dominicana en nombre de otra persona. Fue arrestado por conducir bajo la influencia y conducir después de la denegación, suspensión o revocación de la licencia de conducir.

En marzo de 2017, Portes-Ortiz fue arrestado en Dedham, MA, luego de intentar comprar un iPhone y un iPad con un valor de más de $1,000 usando una licencia de conducir que muestra su fotografía y una tarjeta de crédito, ambos a nombre de una mujer.

En el momento de su arresto, se determinó que Portes-Ortiz estaba en posesión de una tarjeta de Neighborhood Health Plan of Rhode Island, una tarjeta EBT de Rhode Island para los beneficios de SNAP, una tarjeta de identificación de Rhode Island, una licencia de conducir puertorriqueña y una tarjeta de débito bancaria, algunos con su fotografía pero todos con nombres distintos a los suyos. Más tarde, a través de las huellas dactilares, se determinó que la persona arrestada era en realidad Portes-Ortiz.

Una investigación extensa dirigida por agentes locales del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. Oficina del Inspector General, Oficina de Investigaciones determinó que Portes-Ortiz utilizó varios nombres y robó información de identificación personal para obtener las tarjetas de identificación de Rhode Island; Medicaid y beneficios de atención médica, incluidos los servicios médicos, farmacéuticos y dentales; y tarjetas EBT y beneficios SNAP.

La investigación también determinó que Portes-Ortiz trabajaba en una tienda minorista y, al mismo tiempo, obtenía de manera fraudulenta los beneficios y servicios del programa federal usando identidades robadas e información de identificación.

 

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El análisis estudió las paradas de tráfico conducidas por agentes de 37 departamentos de policía municipal, la Policía Estatal de Rhode Island y otras agencias. Se observó que un total de 11.4% de los automovilistas detenidos eran negros y 13%, hispanos. 

PROVIDENCE, RI.- El Departamento de Transporte de Rhode Island (RIDOT) publicó un análisis del Instituto de Políticas Municipales y Regionales (IMRP, por sus siglas en inglés), de la Central Connecticut State University (CCSU), que muestra importantes hallazgos sobre las paradas de tráfico policiales en Rhode Island.

El análisis estudió las paradas de tráfico conducidas por agentes de 37 departamentos de policía municipal, la Policía Estatal de Rhode Island y otras agencias. La Ley de relación integral entre la comunidad y la policía exige que RIDOT reciba los datos de los departamentos de policía sobre las paradas de tráfico.

Se observó que un total de 11.4 por ciento de los automovilistas detenidos eran negros y 13 por ciento, hispanos. El análisis encontró que los automovilistas detenidos tenían más probabilidades de ser percibidos por los oficiales detenidos como minorías durante el día en relación con la oscuridad lo que sugiere la existencia de una disparidad racial o étnica en términos de tratamiento de automovilistas de minorías con respecto a los automovilistas blancos.

El análisis también encontró que los departamentos de policía de Rhode Island mostraron una tendencia a tener menos éxito encontrando contrabando en las búsquedas de motoristas que involucran a conductores minoritarios.

“No existen vínculos claros en estas disparidades observadas con los perfiles raciales, ya que pueden ser impulsados por cualquier combinación de políticas policiales, patrones de aplicación heterogéneos o comportamiento de oficiales individuales”, dice el estudio.

El informe contiene un análisis de aproximadamente 237,000 paradas de tráfico realizadas en Rhode Island entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de diciembre de 2016. Se aplicaron seis pruebas estadísticas y descriptivas a los datos de mbre de 2016. Se aplicaron seis pruebas estadísticas y descriptivas a los datos de cada departamento, haciendo de este uno de los análisis más exhaustivos realizados a nivel nacional.

Los hallazgos presentados en el informe son el primer paso, esencialmente la base, de un proceso para comprender mejor cómo la aplicación de las leyes de tránsito afecta a los segmentos de la población de conductores de Rhode Island. Estos análisis iniciales sirven como una herramienta de detección, destacando las áreas donde las disparidades entre razas y etnias son mayores en la aplicación del tráfico en todo el estado, proporcionando así orientación sobre dónde centrar la atención y los recursos para el próximo paso del proceso en todo el estado.

Los resultados también mostraron que cuatro departamentos municipales y un cuartel de la policía estatal exhibieron disparidades estadísticas que justifican un análisis posterior. Estos departamentos son: Cranston, Narragansett, North Smithfield, Providence y el cuartel de la policía estatal de Hope Valley Rhode Island.

Para obtener más información o una copia del informe 2016 de Análisis y hallazgos de "Traffic Stop Data", vaya a www.dot.ri.gov/community/CCPRA.

 

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Anthony Correa, de 31 años, fue acusado de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y / o drogas intoxicantes, con muerte resultante; negativa a someterse a una prueba química; obstrucción al trabajo de un oficial de policía en cumplimiento de deberes y conducir con una licencia suspendida, entre otros cargos

PROVIDENCE, RI.- La Policía Estatal de Rhode Island informó que un residente de Cranston murió producto de las lesiones recibidas al ser expulsado de un vehículo motorizado que se estrelló en la Interestatal 95, en Providence, en horas de la madrugada del pasado sábado, 20 de octubre.

La víctima fue identificada como Jason E. Irizarry, de 35 años, residente del 944 Cranston Street, en Cranston.

Irizarry era un pasajero en un automóvil que supuestamente viajaba a una alta velocidad en la Interestatal 95 Norte, cuando se accidentó cerca de la Branch Avenue. Irrizary fue declarado muerto en la escena. El informe policial indica que no llevaba puesto el cinturón de seguridad.

De acuerdo con la información enviada a la redacción de Acontecer Latino por la Policía Estatal, el conductor huyó después del accidente y fue arrestado poco después por la policía de Providence en la Abbott Street.

El conductor fue identificado como Anthony Correa, de 31 años, residente del 7 Linwood Avenue, Providence. Correa fue acusado de: conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y / o drogas intoxicantes, con muerte resultante; negativa a someterse a una prueba química; violación al deber de parar tras provocar un accidente que resulte en muerte; obstrucción al trabajo de un oficial de policía en cumplimiento de deberes y conducir con una licencia suspendida / revocada / cancelada (tercera infracción)

La Policía Estatal dijo que Correa también tenía tres órdenes de detención por cargos de delitos graves emitidas por los Departamentos de Policía de Warwick y North Providence.

Tras su arresto, fue procesado en el cuartel de Lincoln Woods y ordenado a permanecer tras las rejas en el Instituto Correccional de Adultos (ACI), a la espera de una nueva acción judicial.

 

El accidente sigue siendo investigado por soldados de la tropa de Lincoln Woods, la Unidad de reconstrucción de colisiones y la Unidad de servicios forenses.

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PROVIDENCE, RI.- Una mujer residente en Providence fue impactada con una pistola Taser, cuando un sargento del Departamento de Policias de esta ciudad la enfrentó luego de que supuestamente esta amenazara con bate de beisbol de aluminio a un grupo de personas.

Rosalidia Garcia, de 23 años, fue detenida y acusada de conducta desordenada. El incidente tuvo lugar la noche del domingo, en una vivienda ubicada en las inmediaciones del Parque Roger Williams, aproximadamente a las 11:30 pm.

El sargento Patrick Potter dijo que cuando llegó al lugar de la escena, econtró a Garcia gritándole a un grupo de personas, mientras se les acercaba amenazantemente con un bate en la mano.

Potter señaló que trató de convencerla para que dejara caer el bate, pero García se negó, levantándolo (el bate) en sus manos. El sargento añadió que la mujer estaba lo suficientemente cerca como para golpear a las otras personas por  lo que la gopeó en la espalda con la Taser.

Tras el impacto, la mujer cayó al suelo y fue esposada. Rosalidia García fue llevada al Hospital de Rhode Island para recibir tratamiento rutinario para casos de uso de pistola Taser.

 

 

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PROVIDENCE, RI.- La Policía Estatal de Rhode Island arrestó al abogado Robert McNelis, de 38 años, residente en Providence por falso informe de un crimen, obstrucción de un oficial de policía, apropiación ilegal, conspiración para cometer apropiación ilegal, solicitud de otro para cometer un delito: falsificación y falsificación en general, conspiración para cometer falsificación , redacción y publicación, fraude bancario y conspiración para cometer fraude bancario, entre otros cargos.

En agosto de 2017, la Unidad de Delitos Financieros de la Policía del Estado de Rhode Island investigó una demanda por fraude presentada por Xtreme Computers, LLC., un servicio de cambio de cheques ubicado en 210 Lonsdale Avenue, en Pawtucket.

Xtreme Computers informó que, a partir de enero de 2016, una persona identificada como Marcus Crook cobró numerosos cheques que se le habían pagado a él y se incluyeron en una IOLTA o Cuenta Fiduciaria de Interés de BankRI que pertenecía al abogado McNelis. Los detectives más tarde acudieron al bufete de abogados  McNelis, ubicado en 986 Hartford Avenue, en Johnston.

Los detectives entrevistaron al abogado McNelis y durante la entrevista este declaró que en la primavera de 2016 se enteró de que su talonario de cheques IOLTA del BankRI  había sido robado. El abogado dijo que se enteró del robo después de que un cheque emitido a un quiropráctico en nombre de un cliente había sido devuelto por insuficiencia de fondos. El abogado McNelis informó que se comunicó a BankRI y se enteró de que se habían aprobado varios controles en Xtreme Computers.

McNelis informó a los detectives que cada uno de los cheques había sido robado y falsificado, y que deseaba iniciar un proceso judicial. Dijo que conocía al Sr. Crook, que había cobrado los cheques robados, pero que no tenía ninguna relación personal o profesional con él, y que su contacto con éste Crook era "limitado en el mejor de los casos".

Una revisión posterior de los registros del abogado McNelis reveló que el Sr. Crook cobró un cheque adicional, que se giró en la cuenta personal de McNelis. El abogado  luego informó que este cheque también había sido robado. En total, se escribieron ocho cheques en las cuentas BankRI del abogado McNelis. Como resultado, Xtreme Computers, LLC, sufrió una pérdida de $ 7,705.00 y el abogado McNelis sufrió una pérdida de $ 5,138.32. Los detectives posteriormente obtuvieron una orden de arresto contra el Sr. Crook en base a la información anterior.

En diciembre de 2017, el Sr. Crook fue arrestado en relación con los cargos por cambio de cheques. Como resultado de la investigación en curso, los Detectives determinaron que el abogado McNelis supuestamente había ordenado al Sr. Crook cobrar los cheques en su nombre. La investigación corroboró ciertos aspectos clave de lo que el Sr. Crook le había dicho a los investigadores.

Robert McNelis fue presentado en el Tribunal de Distrito de la Sexta División, en Providence, Rhode Island, el pasado miércoles.

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