Fallece el padre Raymond Tetrault, un líder comunitario de cuerpo y alma

Comunidad
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El padre Tetrault falleció el pasado martes. Sus restos serán velados este viernes de 5 de la tarde a 7 de la noche, en Blessed Sacrament Church, 239 Regent Avenue, de Providence. Por considerarlo de interés reproducimos esta entrevista que hicimos hace algunos años al sacerdote, quien fue un connotado líder y defensor de la comunidad hispana de Rhode Island por más de 40 años.
 
PROVIDENCE. Quizás no tiene físicamente el brío que décadas atrás lo llevó a jugar un rol protagónico en la consecución de importantes conquistas para la comunidad latina de Rhode Island, pero la edad no ha podido menguar en el padre Raymond Tetrault su sentido de justicia y su lucha incansable porque en el estado – y en el país- se reconozca la importancia que tienen los hispanos.
     A punto de convertirse en octogenario (tiene 79 años), y aunque está retirado como párroco, el padre Tetrault sigue activo oficiando misas en distintas iglesias católicas de Rhode Island.
      Vive en una modesta vivienda en el vecindario de Olneyville, en Providence, donde dedica todo el tiempo que no está en la iglesia a la lectura, la oración y la reflexión.
      Desde el ventanal en el comedor de la casa, ubicada en un segundo piso, el padre Tetrault le da un vistazo a la ciudad, la misma que lo vio nacer, y en la que ha dejado escrito para la posteridad un importante legado.
     Este sacerdote, nacido en Providence pero de origen canadiense e irlandés, fue una figura clave en diversos hechos históricos para los latinos en el estado. Fue el padre Tetrault el que inició de manera formal las misas en idioma español en Rhode Island en 1969, cuando esto era tan solo una aspiración de los feligreses de habla hispana.
     El encabezó, igualmente, junto a otros líderes comunitarios en los años 70, la lucha porque se incluyera personal que hablara español en el principal hospital del estado y también dio la pelea para que la División de Motores y Vehículos tomara la decisión de incluir material escrito y dar los exámenes teóricos en español para obtener la licencia de conducir.
      “Fueron momentos de acciones grandes e inmediatas”, recuerda el padre Tetrault, al tiempo de lamentarse que en la época actual, y cuando enfrenta desafíos tanto o más grandes que antes, “la gente no esta respondiendo como debe”. 
      “Todos tienen mucho interés, pero nadie sigue haciendo manifestaciones, eso ha disminuido. Todos estamos en este momento de, como decimos en inglés, un ‘hiatus’, una pausa. No sé qué necesitan para animarles de nuevo. Si tuviera la oportunidad de animarlos les diría que fueran en masa a la oficina del gobernador para impresionarle. Si el pueblo se une puede lograr más cosas”, expresa el sacerdote.
       Sobre este y otros temas conversamos desde su casa con el padre Tetrault. A seguidas, la entrevista en detalle:
 

 ¿Cómo se inicia su relación con la comunidad hispana de Rhode Island? 

Yo hice mis estudios en Europa, tuve la oportunidad de estudiar español en España. En el 1969 caminaba por las calles y escuchaba a los dominicanos hablando en español y empecé a acercarme a ellos. Un día estaba en una bodega, de las pocas que había en ese tiempo, un hombre entró, se llamaba Felix Hendelson, de Monción, el preguntó al dueño de la bodega si había misas en español y él le dijo ‘yo no sé, pregúntele a él que es sacerdote’. Yo le dije que no había, pero que si él quería podíamos hacerla en su casa. Fue así que empezamos haciendo misas en español en el 656 Broad Street frente al St Joseph Hospital, en Providence.
Después de que empezó a venir mucha gente empezamos a hacerla en el sótano de la iglesia San Miguel. Un artista lo arregló para que fuera una capilla muy bonita, donde todo el mundo pudiera responder a mis palabras de la Homilía. Allí celebramos la misa por largo tiempo.
Eran los años de oro era una comunidad nueva, principalmente de Santo Domingo. La gente participaba mucho porque todo el mundo podía ponerse de pie y hablar y todos los escuchaban, tuvimos muchas actividades muy buenas, muchos programas sociales, trabajos con los jóvenes que siempre recuerdan lo que hicimos juntos. En la pascua pasamos toda la noche en la iglesia y a las cinco de la mañana salíamos para ir al mar a esperar la salida del sol. Íbamos en el verano a las montañas, 25 jóvenes durmiendo allá en casitas, fueron tiempos muy lindos.
 
¿Entonces, usted fue el precursor de las misas en español en Rhode Island?
 
Bueno, la misa en español no era una costumbre, aunque en la universidad Providence College había un padre que celebraba una misa para los cubanos. Nosotros empezamos a hacerlo en 1969. Luego en el año 70 los hombres y las mujeres dijeron que teníamos que tener un apostolado. Un grupo de ellos fueron conmigo a hablar con el obispo, dijeron que debía establecer un apostolado para los latinos y tener a este sacerdote como su guía. El obispo estuvo de acuerdo y a partir de ese momento fui designado para dar misa para los hispanos en todo el estado. Luego llegaron otros sacerdotes de España y me ayudaron.
Ahora hay 14 parroquias que tienen misas en español y se puede notar la diferencia en el número de la gente que hay en todo el estado de Guatemala. México, Bolivia, Colombia, República Dominicana, Puerto Rico.
 
¿Qué ha sido para usted lo más representativo de este crecimiento?
 
En el sentido social la comunidad ha tomado su responsabilidad, hasta que logramos tener lo que no hubiéramos podido creer, un alcalde ¡Quién lo hubiera creído, 40 años atrás! Tenemos senadores, representantes. Es un gran fenómeno. Algunos de ellos eran niños en la parroquia, como Angel Taveras, que es ya el jefe de la ciudad de Providence.
 
¿Qué tan activo era en sus tiempos el liderazgo comunitario entre los hispanos?
 
Hace 40 años tuvimos organizaciones de la iglesia, una de ellas se llamaba Acción Hispana, hoy Progreso Latino, que tiene su oficina en Central Falls. Esto empezó con dos o tres personas y luego se juntaron otras con ellos. Yo recuerdo una vez que convocamos a una reunión al presidente del Rhode Island Hospital para pedirle tener gente que hable español en el hospital y él no vino a la reunión. Entonces dijimos: “no vino, vamos a su casa”. Era una noche de mucha lluvia, nos fuimos a Barrington, a un lugar muy exclusivo y cuando nos abrió la puerta de su casa le dijimos ‘somos la gente con la que usted tenía que hablar y no se presentó’. Entramos a su elegante sala, con los pies mojados,  y hablamos con él para explicarle. La próxima vez mandó tres o cuatro representantes y decidieron emplear gente que hable español en la DMV.
En los 70, no recuerdo la fecha, había problemas en la oficina de la DMV porque no tenía nada en español. Ni libros, ni exámenes, y la gente recibía su licencia si pagaban. Una vez tomamos la oficina de Smithfield y logramos paralizarla hasta que cambiaron las cosas.
Fueron muchas acciones inmediatas. Hay mucha gente ahora que tiene puestos importantes, como Mario Bueno, que traducía en las reuniones para sus padres lo que decía la gente; Juan Pichardo era un niño y vio todo eso y me imagino que se inspiró para dedicarse al bien de la comunidad.
Muchas cosas hicimos para quitar el miedo de entrar a la oficina del gobernador. La gente perdió su miedo poco a poco. Son gente que trabaja para nosotros y tenemos derecho de hablar con ellos.
Hacíamos viajes a Washington para entrar a las oficinas de los congresistas. Gente que no tenía papeles entraba con nosotros para decirles lo que necesitaban. Ellos perdieron el miedo. Yo creo que eso era tan grande porque la mayoría de los norteamericanos jamás han pensado hacer eso, pero tenemos indígenas de Guatemala que se han atrevido a hacerlo.
La comunidad sigue siendo activa, hay grupos como Inmigrantes en Acción bajo el liderazgo de Juan García que ha luchado por licencias de conducir para indocumentados lo cual no se ha logrado. A veces hay que tener paciencia para poder conseguirlo. El gobernador no sé, no va a correr más, y aun con eso no quiere ceder.
 
¿Cree usted que la comunidad tiene la misma fuerza y cohesión que tuvo en sus tiempos? ¿Se lucha en la dirección correcta?
 
No se ha hecho la presión necesaria. La gente, creo, está un poco desanimada en este momento y no han hecho la fuerza. El número de gente que llega a esas reuniones no es el mismo como antes, yo creo que la gente se cansa. Hace como 4 o 5 años tuvimos una gran marcha el 1 de mayo había como 15 mil personas, desde Central High School al Capitolio.
La gente no esta respondiendo como debe. Los que van ahora dicen que solo había 25 personas y con eso no se puede lograr mucho
Todos tienen mucho interés pero nadie sigue haciendo manifestaciones, eso ha disminuido todos estamos en este momento de…. como decimos en inglés, un ‘hiatus’, una pausa, no sé que necesitan para animarles de nuevo. Si tuviera la oportunidad de animarlos les diría que fueran en masa a la oficina del gobernador para impresionarle. Si el pueblo se une puede lograr más cosas.
 
Padre, muchas cosas han cambiado en estos 40 años en el estado, por encima de la iglesia, incluso. Una de ellas es el matrimonio homosexual….
 
Yo creo que Santo Tomas de Aquino dijo que a veces se necesitan leyes civiles para el bien de la comunidad y creo que esa ley lo que hace básicamente es animar a la gente a entrar en una relación estable, fija, una relación de amor y ese es un bien en el sentido de que está diciéndoles que podemos reconocerles no como brincando de una persona a otra, sino entrar en una relación estable de amor. Es mejor que dejarlos sin nada, en ese sentido es bueno
 
Su opinión sobre los abusos sexuales dentro de la iglesia
 
Creo que es un desastre. Lo que hicieron sacerdotes es olvidarse completamente de su dedicación que tenían desde el principio, es cierto que los obispos en muchas ocasiones pensaban más en la estructura de la iglesia que en las victimas y eso es un gran descuido como pastores hacia la gente. El papa Francisco desde Roma nos está animando a  ser pastores caminando con el pueblo.
Las victimas de ese pecado son los más inocentes y eso es algo terrible. Yo sé que los obispos de aquí en los Estados Unidos tienen su programa para eliminar eso, pero ha costado muchos años para que ellos lo reconozcan y desde Roma van a tener una reunión ahora para establecer comisiones y leyes internacionales.
 
¿Usted cree que los escándalos por abusos sexuales y la respuesta de la iglesia han contribuido al alejamiento de sus feligreses?
 
Sí, sí, mucha gente se ha alejado. Aquí en New England, alguien me dijo, que el 30% ya no va a la iglesia católica, se ha alejado o ha buscado otra religión. Es triste, porque tal vez su fe está en su corazón, pero no tener la comunidad para apoyarle en sus momentos difíciles para sostenerle en creer en la bondad de Dios es un poco más difícil.
 
Algunas corrientes sugieren que tal vez si a los sacerdotes se les permitiera casarse se acabarían un poco esos abusos. Que opina usted?
 
Yo creo que es cierto. Espero que con el nuevo Papa se pueda reconocer eso.
 
¿No iría eso en contradicción con los principios de la fe católica? Para los curas el celibato es una de las principales características...
 
Ya se reconoce teológicamente que son dos cosas distintas. Ser párroco, pastor es una cosa y llevar el celibato es otra. Dios puede dar un regalo a uno sin dar otro y eso es algo en lo que la iglesia ha sido lenta en reconocer. Podemos tener hombres y mujeres como misioneros y sacerdotes que quieren dedicar su vida así, no tienen tiempo para dedicarse a una familia, aunque hay muchos que lo hacen, todo es posible.
Yo he leído, no sé donde, que un alto porcentaje de los niños, como 25% han sido molestados sexualmente por sus padres naturales o por otra gente. Yo me sorprendí oyendo eso. Quiere decir que el hecho de que uno este casado no significa que eso va a terminar con nada. En cuanto a la respuesta a su pregunta de si el celibato sería la sanación a esa herida en la iglesia, no, no necesariamente. Hombres casados o célibes pueden hacer el mismo error.
Yo estoy de acuerdo que tiene que ser reconocido que no todos los jóvenes que quieren ser sacerdotes están llamados a hacer el celibato.
 
Mujeres sacerdotes es otro tabú en la iglesia católica, ¿usted qué opina?
 
Yo creo que eso tiene que venir también. Las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres.  El Papa dijo recientemente que el no va a nombrar mujeres como cardenales porque seria muy clerical, pero los cardenales que lo eligen a el son todos clérigos, entonces por qué no tener laicos? El dice que no, pero yo creo que él tiene que abrirse un poco a ese cambio.
 
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