Quiero iniciar diciendo que uno de los grandes motivos de celebración en el mundo es, precisamente, la culminación de los estudios académicos entre una etapa y otra, ya que de estudiar nadie termina. Sin embargo, existen diferencias muy grandes y significativas con el resto de las demás y éstas son: Graduación de Ya Sé Leer, Bachillerato (High School) y la graduación de la universidad (Bachelor).
Por supuesto que estos pasos son imprescindibles para continuar en ese fascinante, pero sacrificado camino, de alcanzar esos títulos que acreditan en todas las áreas de la ciencia y la tecnología, en materia de derechos, grandes ambientalistas, etcétera; gente que se prepara muy bien para brindarle grandes aportes a la humanidad. Estas graduaciones de este año 2021 son históricas, tras una pandemia que cambió de forma radical el curso del pasado año y que continuó con fuerza en éste y con la cual aún se está luchando, no parecía dar espacio ni a la conclusión y menos a celebrar graduaciones en las diferentes escuelas y universidades en las naciones que conforman el mundo. Más bien vivíamos la incertidumbre y mucha impotencia sobre lo que pasaría al siguiente minuto.
Gracias a Dios y los esfuerzos y aportes de la ciencia y la medicina finalmente obtuvimos el beneficio de vacunas que permitieron en muchos centros académicos realizar y celebrar en persona, distinto al pasado año que fue totalmente virtual. Hemos tenido el placer y el privilegio de asistir y ver la solemnidad de ceremonias como la de Providence College, cuyo discurso estuvo a cargo de la doctora Laurie Santos, dejó a profesores, graduandos y familiares con un gran sabor a felicidad. Orgullosamente disfrutamos la investidura de Amanda La Paz, mi sobrina, motivo de inspiración para todos nosotros. También, de toga y birrete estuvo el joven Sixto Taveras Jr., de Boston College.
Los mejores parabienes a todos los graduandos y familiares. Claro que no todos han corrido con la misma suerte. Existen muchísimos casos en que debido a los protocolos de seguridad solo han permitido a estudiantes y el personal de las escuelas/universidades asistir a las celebraciones sin permitir ningún visitante. Si vemos que conforme pasan los días las cosas parecen mejorar, eso nos llena de aliento. Cierto es que cada una de las personas envueltas en todo lo que tiene que ver con materia de educación merece todo nuestro respeto, pero con las emergencias sanitarias del planeta en éstos últimos dos años tenemos que verlos como verdaderos héroes y heroínas. Me refiero a padres, alumnos, personal docente y todo el personal de apoyo.
Nuestras felicitaciones a todos, han demostrado tesón y muy buena voluntad para salir adelante. ¡Sí se puede! ¡Hasta una próxima oportunidad! Seguimos en Orden Divino. Vivir no se posterga. Mi correo julianormarodriguez@gmail. com Instagram @jnormarodriguez Twitter @jnormarodriguez Facebook Julia Norma Rodriguez.
Add a comment